Los primeros en subir al escenario fueron los madrileños PUSSYCAT KILL, que definen su propio estilo como "faster than punk". En cuanto a la ejecución de esa supuesta supervelocidad, que no nos pareció tal, y del sonido de la banda, pasan del aprobado junto a la voz de Sophie, aunque algo más de potencia mejoraría el show. Sin embargo, a nivel de composición, se quedaron más que cortos. Ritmos y melodías parecían repetirse canción tras canción, haciendo del concierto un tedioso aperitivo para poder disfrutar del resto de bandas. Mucho ruido y pocas nueces, que diría alguna abuela. Eso sí, no hace daño incluir un tema suyo en mitad de una lista de reproducción.
Llegaba el turno de los vascos SCREAMERS & SINNERS, que llevan unos meses paseando este nuevo grupo por la geografía española y cuyo álbum debut empezarán a grabar el próximo 1 de Abril. El cuarteto comenzaba su turno con nervios confesos que medraron a medida que avanzaba la noche y que suplieron con su impresionante despliegue de cuerdas, tanto a la guitarra de Iago como al contrabajo de Karlos. Contaron con el apoyo del saxo y la armónica de Ibai (Los Galerna) en varios de los temas y, pese a tener un sonido no apto para puristas, consiguieron meterse al público en el bolsillo con su raw psychobilly. Una propuesta que nos encantó y a la que deseamos un gran escándalo.