29 mar 2013

IV St Patrick's Day Madrid: PUSSYCAT KILL + SCREAMERS & SINNERS + PIPES AND PINTS

El pasado sábado 23 de Marzo fuimos al Gruta 77 para rematar el último festejo del IV St. Patrick's Day Madrid con mucha birra y más punk.

Los primeros en subir al escenario fueron los madrileños PUSSYCAT KILL, que definen su propio estilo como "faster than punk". En cuanto a la ejecución de esa supuesta supervelocidad, que no nos pareció tal, y del sonido de la banda, pasan del aprobado junto a la voz de Sophie, aunque algo más de potencia mejoraría el show. Sin embargo, a nivel de composición, se quedaron más que cortos. Ritmos y melodías parecían repetirse canción tras canción, haciendo del concierto un tedioso aperitivo para poder disfrutar del resto de bandas. Mucho ruido y pocas nueces, que diría alguna abuela. Eso sí, no hace daño incluir un tema suyo en mitad de una lista de reproducción.


Llegaba el turno de los vascos SCREAMERS & SINNERS, que llevan unos meses paseando este nuevo grupo por la geografía española y cuyo álbum debut empezarán a grabar el próximo 1 de Abril. El cuarteto comenzaba su turno con nervios confesos que medraron a medida que avanzaba la noche y que suplieron con su impresionante despliegue de cuerdas, tanto a la guitarra de Iago como al contrabajo de Karlos. Contaron con el apoyo del saxo y la armónica de Ibai (Los Galerna) en varios de los temas y, pese a tener un sonido no apto para puristas, consiguieron meterse al público en el bolsillo con su raw psychobilly. Una propuesta que nos encantó y a la que deseamos un gran escándalo.




Por último llegaba el turno de una banda consagrada a base de punk, gaitas y un derroche brutal de energía y cerveza. Desde la República Checa llegaban PIPES AND PINTS para inundar la capital madrileña de punk-rock'n folk. Tras sacar su segundo LP Found and lost (2012) emprendieron la gira que acaba de traerles a nuestro país y que este mes les tiene viajando por Alemania.

Su sonido se sostiene entre ese punk norteamericano tan comercial y la columna vertebral del espíritu celta, como hacen The Pogues, pero añadiendo la suciedad y brutalidad de un estilo propio liderado por el cantante Tomas Novotny y el gaitero y vocalista Vojta Kalina, que no paran de agitar al público en todo momento, el uno ordenando paredes de la muerte y duchándose en cerveza y el otro saltando y sonriendo cual duendecillo enloquecido. Buena música y muy recomendable espectáculo en el que difícilmente te libras de la tentación de entrar a un pogo y de echarte unas risas. Un final feliz y sudoroso fue el perfecto fin de fiestas del St. Patrick's Day.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Si lo lees tienes opinión y si la tienes, ya sabes: opina!